Tomado del diario The New York Times, 21 de marzo de 2012
Los acusados criminales tienen un derecho constitucional a abogados efectivos durante negociaciones de culpabilidad, la Corte Suprema dictaminó en miércoles.
Los casos decididos el miércoles respondieron la pregunta: ¿Qué se puede hacer en casos en los cuales la incompetencia de un abogado causa que el cliente rechace un acuerdo de culpabilidad favorable?
Un 97% de convicciones en los tribunales federales fueron resultado de declaraciones de culpable. En 2006, el último año del cual hay disponible datos, el porcentaje correspondiente en los tribunales estatales fue 94.
“En el sistema de justicia criminal de hoy, escribió la Corte, “la negociación de un acuerdo de culpabilidad, es casi siempre el punto crítico para un acusado. La Corte escribió que las negociaciones de culpabilidad “no es un asunto adjunto al sistema de justicia criminal; sino que de hecho es el sistema de justicia criminal.”
Uno de los casos Missouri v. Frye, No. 10-444, involucró a un acusado que fue incriminado de conducir sin licencia en 2007. Un fiscal le ofreció que se declarara culpable a cambio de una condena de 90 días.
Pero el abogado del acusado, en ese momento, dejó de decirle la oferta a su cliente. Después de que la oferta expiró, el acusado se declaró culpable sin ninguna oferta de culpabilidad, y un juez lo sentenció a tres años tras las rejas.
La Corte dijo que el acusado al acusado debió permitírsele tratar de probar que él hubiese aceptado la oferta original. Pero eso fue solamente el comienzo de lo que el abogado hubiera tenido que demostrar para tener remedio.
Él también hubiera tenido que demostrar que los fiscales no hubieran retirado la oferta si él la hubiese aceptado, tal como se les hubiese permitido bajo la ley estatal. Finalmente, el acusado hubiera tenido que demostrar que la Corte hubiera aceptado el acuerdo.
El segundo caso, Lafler v. Cooper, No. 10-209, involucró a un acusado que le disparó a una mujer en Detroit en 2003 y después recibió consejo legal inapropiado. Dado que cuatro de sus balas le dieron a su victima debajo de la cintura, su abogado dijo incorrectamente que el acusado no podría haber sido convicto de asalto con la intención de asesinar.
Con base en ese consejo, el acusado rechazó un acuerdo de culpabilidad que ofrecía una condena de cuatro a siete años. Él fue convicto, y ahora está cumpliendo una condena de 15 a 30 años.
La Corte Suprema rechazó el argumento del fiscal que todo lo que el acusado merecía era un juicio justo. Un juez federal del distrito en eso caso trató de requerir que los oficiales le proveyeran con el convenio inicial o que lo liberaran. La Corte Suprema dijo que el remedio correcto era requerir que el acuerdo de culpabilidad fuera ofrecido de nuevo y después permitir que el tribunal de primera instancia condenara de nuevo al acusado según a él le parezca, si él lo aceptara.
Los Jueces que estuvieron en desacuerdo con la opinión dijeron que esto era “un remedio nunca oído en la jurisprudencia americana.” Un profesor de leyes dijo que las decisiones fueron un gran paso adelante. Pero él admitió que eso puede aumentar la astucia. “Va a ser complicado,” él dijo,” y van a haber muchos acusados que van a decir, después de ser convictos, que ellos realmente hubieran aceptado el acuerdo de culpabilidad.”
La Corte sugirió varias “medidas para ayudar a evitar reclamos tardíos, frívolos, o fabricados.” Entre ellas se encontraba requerir que las ofertas de culpabilidad fueran presentadas por escrito o hechas en audiencia pública.
Mi opinión: Pese a que aplaudo la decisión, no creo que va a tener un impacto considerable. Primero que todo, como la opinión nota, el 94 por ciento de los acusados se declaran culpables. Así que para ellos eso no es ningún problema. Los abogados obviamente les aconsejaron que aceptaran la declaración de culpabilidad y ellos lo hicieron. Segundo, la mayoría de los abogados dudan irse a juicio antes de explorar otras alternativas. Un juez del distrito federal que desde que se retiró dijo que en su experiencia la mayoría de los abogados defensores no quieren irse a juicio, y que la mayoría de los fiscales no quieren irse a juicio, y así mismo que la mayoría de los jueces no quiere decidir, prefiriendo el consenso en vez de las disputas—aunque él lo dijo de manera más graciosa: los abogados defensores ni quieren defender, los fiscales no quieren enjuiciar, y los jueces no quieren juzgar. No es una opinión que yo necesariamente comparto, pero vale la pena considerar.
En resumen: La mayoría de los casos van a continuar a desafiar los acuerdos de culpabilidad que el acusado aceptó en vez de la oferta de culpabilidad que él no aceptó. Como la poeta Ángela Maya dijo alguna vez, las cosas usualmente no son tan buenas como uno piensa, ni tampoco tan malas—algo de consuelo, espero para la opinión disidente en este caso.
– David Zapp, Abogado