Por Johanna Zapp
Lo siguiente es parte de un artículo que apareció en el diario New York Times recientemente. El mismo habla de la decadencia de los juicios con jurado en nuestros tribunales. Hace poco estuve en la Radio Pública Nacional para tratar exactamente este tema. Yo comentaba sobre cómo los acusados están aterrorizados ante la idea de ir a juicio. Un acusado informado ha escuchado las historias de lo que ocurre cuando algunas personas van a juicio. En lugar de los 4, 5, o 6, ofrecidos en un acuerdo, los acusados podrían terminar con condenas de 25, 30 o 35 años. Es una triste realidad.
Juicio con jurado. Un sagrado derecho norteamericano, en vía de expiración.
Por Benjamin Weiser (NYTimes de agosto 7, 2016)
El juicio penal terminó hace más de dos años y medio, pero el Juez Jesse M. Furman, aún recuerda vívidamente este caso. Un juicio que se destaca, no por el acusado o la materia del caso, pero debido a su rareza: Durante sus más de cuatro años como juez de la Corte Federal del Distrito en Manhattan, era su único juicio criminal con jurado. Y él no es el único.
El juez J. Paul Oetken, en su mitad de década en la magistratura, ha tenido solamente cuatro juicios penales; entre ellos, uno que se repitió después de que el jurado no logro llegar a un veredicto. El juez Lewis A. Kaplan, quien ha manejado algunos de los casos de terrorismo más importantes del país, no ha tenido un juicio criminal con jurado en los últimos 18 meses.
“Es una pérdida”, opina el juez Kaplan, “porque cuando pensamos en el sistema de justicia americano, pensamos en ser juzgados por nuestros conciudadanos. Y en la medida en que hay una disminución en los juicios penales con jurado, eso está sucediendo con menos frecuencia”.
El tema de la disminución de juicios, tanto criminales como civiles, ha sido reportado en artículos de publicaciones legales, estudios de asociaciones de abogados y opiniones jurídicas. Sin embargo, recientemente, en los dos juzgados federales de Manhattan y en White Plains (conocidos colectivamente como el Distrito Sur de Nueva York), la desaparición de los juicios criminales con jurado nunca fue tan notoria.
El año pasado, el Distrito Sur llevó a cabo solamente 50 juicios criminales con jurado, la cifra más baja desde 2004 de acuerdo a datos facilitados por el tribunal. El ritmo sigue siendo lento este año.
“Es muy decepcionante,” opino el juez Jed S. Rakoff, un veterano de 20 años en la corte federal de Manhattan. “Un juicio es el único lugar en el cual el sistema realmente se pone a prueba. Todo lo demás se lleva a cabo a puerta cerrada “
Según los expertos legales, el descenso se debe principalmente a la llegada de las pautas de sentencia del Congreso y el aumento del uso de sentencias mínimas obligatorias, que transfirió el poder a los fiscales, y previene a los acusados de ir a juicio, donde, si son declarados culpables, podrían enfrentar penas más severas.
Julia L. Gatto, un defensor público federal, recordó el caso de Oumar Issa, un maliense arrestado en África en 2009 durante una operación encubierta, por cargos de conspiración para narcoterrorismo, que llevó a una sentencia mínima obligatoria de 20 años, y de conspirar para asistir a una organización terrorista, que no tenía mínimo.
Aunque la Sra. Gatto y su cliente consideraban que los elementos del caso eran débiles y que había fuertes circunstancias atenuantes, el Sr. Issa decidió que el riesgo de ir a juicio era demasiado alto. Se declaró culpable en el 2012 de “asistencia material” directamente con los fiscales a condición de eliminar el otro cargo. Recibió una condena de 57 meses en prisión. “Era la única cosa que podía hacer,” opina la Sra. Gatto. “Sus manos estaban atadas.”
El Juez Gleeson escribió que, debido a que todos los acuerdos son negociados antes de que el fiscal prepare el caso para juicio, la
‘presentación delegada’ de pruebas necesarias para la acusación ‘casi nunca es sometida un examen minucioso por parte de los fiscales, abogados defensores, jueces o jurados.’”
‘Todo el sistema pierde ventaja’, agregó, “y no tengo ninguna duda de que la calidad de la justicia en nuestros tribunales ha sufrido como consecuencia de ello.”