Por Benjamin Weiser y Joseph Goldstein
Publicado en el diario New York Times el 23 de diciembre de 2013
“La Juez Principal, Loretta Preska, anunció nuevas reglas para hacer las asignaciones futuras de las causas más aleatorias y transparentes, y ofrecer a las partes un medio para que presenten objeciones a las asignaciones.
“Las causas penales y civiles normalmente se asignan al azar a los jueces federales en la ciudad de Nueva York. Pero hay una regla que puede eludir la regla ‘aleatoria’. Se conoce como la regla de ‘causa relacionada’ y envía una causa directamente al juez que el fiscal o un abogado defensor designa como una causa ‘relacionada’ con otra que el juez ha visto previamente.
“La regla se usa comúnmente para enviar causas que involucran hechos parecidos a un solo juez en aras de eficiencia y economía, pero también ha evocado preocupaciones de que sea ‘ir a seleccionar un juez’.
“Las nuevas reglas requieren que cualquier parte que trate de marcar una causa como ‘relacionada’ con otra causa ya asignada ante un juez presente una declaración que ‘exprese clara y sucintamente la base que sostiene tal afirmación’. Cualquier otra parte puede presentar una objeción por escrito a la afirmación de que las causas estén ‘relacionadas’, dicen las reglas. A pesar de que un juez al que se le pida que acepte una causa ‘relacionada’ todavía toma esa decisión por sí solo, un nuevo comité de asignaciones, formado por tres jueces entre los que se incluye a la juez principal, en el Distrito Sur de Nueva York (también conocido como Manhattan) revisará cada causa en la que se haya hecho una afirmación de que está relacionada.
“Si el comité de asignaciones discrepa de la decisión del juez de aceptar una causa como relacionada, el asunto será asignado al azar a un nuevo juez, dicen las reglas.
“La Juez Principal Preska manifestó: ‘Queremos llevar al máximo la aleatoriedad en la asignación de las causas – queremos regularizar el proceso’. Y añadió: ‘También queremos aumentar la transparencia’. La Juez Preska dijo que las declaraciones presentadas en busca de la designación de una causa como relacionada a otra y todas las objeciones se anotarán públicamente en el libro de registro de causas judiciales. Ella reconoció que un motivo por el cual la ‘aleatoriedad’ es tan importante es para tratar de evitar que se vaya a ‘seleccionar un juez’.
“Ella dijo: ‘Se espera que los jueces sean neutrales, pero todos sabemos que los jueces sostienen puntos de vista diferentes sobre cuestiones debatidas y con frecuencia tienen antecedentes de tomar las mismas decisiones sobre ciertas cuestiones. Es de mayor beneficio que las causas que elevan cuestiones parecidas sean decididas por más de un juez’.
“La Juez Preska dijo: ‘El desarrollo de la ley se sirve mejor teniendo a jueces diferentes decidiendo esas causas de modo que el tribunal de apelaciones se beneficie con lo que diferentes jueces pensaban sobre la cuestión’.
“El envolver al comité de asignaciones en la revisión de peticiones de causas relacionadas añadirá un grado de vigilancia. ‘Habrá mayor uniformidad a lo largo del tribunal con respecto a qué causas se consideran relacionadas y cuáles no lo están’, dijo la Juez Preska.
Se habían elevado preocupaciones en el pasado en causas previas sobre la regla de las causas relacionadas. El comité sobre las reglas, formado por jueces, emprendió su revisión formal en el mes de mayo.
Comentario: Los lectores de este boletín recordarán un artículo pasado que publiqué con respecto a una causa de narcotráfico en la que, en mí opinion, los fiscales del Distrito Oriental de Nueva York fueron a seleccionar el juez. Los fiscales le pidieron a un juez que designara la causa que implicaba a una organización de narcotráfico bastante notoria para que fuera considerada como ‘relacionada’ sencillamente porque la organización de narcotráfico de vez en cuando había hecho cosas con otra organización de narcotráfico cuya causa estaba ante ese juez, a pesar de que no envolvía “hechos parecidos” y ciertamente no favorecía “el ir en aras de eficiencia o economía”. La solicitud fue concedida y con esto se cambió el curso de las vidas de esos acusados.
Nadie imputó la afirmación de que la causa hubiera estado “relacionada” quizás porque los abogados no lo sabían, a pesar de que puedo decirles que cuando una causa mía “por casualidad” está frente a un juez que no es amigo de mi cliente, yo averiguo exactamente por qué. Hay muy pocas coincidencias en la ley penal.
Las nuevas reglas anunciadas por la Juez Preska tratarán este problema de dar aviso. Al requerir un aviso público, cada abogado sabrá si una causa se ha relacionado con otra y estar en una situación que le permitiría impugnar la designación. También los acusados podrán obtener otra oportunidad. Ellos podrán apelar una decisión adversa. Aquellos que supieron de la designación de causa relacionada en el Distrito Oriental de Nueva York puede que muy bien hayan resistido la impugnación de la designación por temor a que de hacerlo pudieran ofender al juez que tenía la última palabra. Ahora el juez tendrá que echar una ojeada a su alrededor. Ya no podrá actuar más como si pudiera hacer lo que quiere.
Basta decir que la solicitud para designar la causa del Distrito Oriental de Nueva York como una causa relacionada fue ante un juez que, como dijera diplomáticamente la Juez Preska, “sostiene puntos de vista diferentes sobre cuestiones debatidas y con frecuencia tiene antecedentes de tomar las mismas decisiones sobre ciertas cuestiones”, favorecería a los fiscales.
Puedo decirles, corriendo el riesgo de personalizar el argumento, pero también fortaleciéndolo, que si la primera causa hubiera estado ante el Juez Weinstein, no hubiera habido un chance en un millón de que los fiscales hubieran tratado que la segunda causa se considerara relacionada. Aquellos de ustedes, fiscales o abogados defensores, que ejercen su profesión en el Distrito Oriental de Nueva York saben exactamente lo que quiero decir. Aquellos que no ejercen allí, sepan sencillamente que el Juez Weinstein es un juez muy liberal e iconoclasta que se reconoce y muy orgullosamente “sostiene puntos de vista diferentes sobre cuestiones debatidas y con frecuencia tiene antecedentes de tomar las mismas decisiones sobre ciertas cuestiones,” lo cual no favorece exactamente a la fiscalía. Por lo general hay un “Juez Weinstein” en cada distrito – si tienen suerte.
Esto no es una crítica del juez que aceptó la causa como relacionada. El juez muy bien pudo haber rechazado la afirmación del fiscal si alguien hubiera impugnado la designación. Y ciertamente no es una crítica de toda la fiscalía federal del Distrito Oriental de Nueva York. El ir a solicitar un juez es algo que se comete raras veces, pero las consecuencias pueden ser tan devastadoras –literalmente pueden cambiar la vida de una persona– que todos los acusados deben de estar pendientes de esto.
Las nuevas reglas fueron emitidas en el Distrito Sur de Nueva York, pero el Distrito Oriental de Nueva York no puede ir muy atrás en la implementación de reglas similares. Los jueces de allá por un largo tiempo han intentado abordar esta cuestión intratable, y varios jueces principales del Distrito Oriental de Nueva York han emitido directivas para desalentar el ir a seleccionar un juez con un éxito limitado.
– David Zapp