Por Benjamin Weiser Publicado en el diario The New York
Times el 30 de agosto de 2012
Un tribunal federal de apelaciones en Manhattan dictaminó el jueves que un hombre convicto de posesión de armas debería haber tenido la oportunidad de decirle al jurado que el testigo principal en su contra, un detective de la Ciudad de Nueva York, había testificado de forma no veraz en procedimientos relacionados a otro caso que involucraba armas de fuego.
La convicción del hombre, Lance White, de 2009, fue descartada y se otorgó un juicio nuevo en la decisión por parte de un panel de tres jueces del Tribunal de Apelaciones de los Estados Unidos para el Segundo Circuito, la cual citó el dictamen del juez de primera instancia sobre lo que el jurado podría escuchar, así como lo que reconoció como otro error hecho por el mismo juez.
El panel notó que el juez del caso previo había “refutado sin lugar a dudas” porciones del testimonio del detective Paul Hermann, hasta sugiriendo que él había “retractado ciertos aspectos” e implicando que él había mentido en una denuncia penal.
“Estos juzgamientos sobre la credibilidad indican claramente la veracidad de Hermann y podrían afectar la determinación de un jurado con respecto a su disposición a mentir con el fin de obtener una condena,” escribió el Juez Guido Calabresi de parte del panel, en una opinión mayoritaria de dos a uno.
El caso previo involucró el arresto en 2008 de Phoenix Goines, quien, Según aseveró el Detective Herrmann, fue detenido en una calle de Brooklyn por sospecha de tener mariguana. El Sr. Goines fue perseguido y cacheado, dijo el Detective Hermann.
Pero el juez en el caso previo, Frederic Block del Tribunal Federal del Distrito en Brooklyn, cuestionó repetidamente la credibilidad del testimonio del Detective Herrmann en varios procedimientos y suprimió un arma y munición que la policía aseveró haber encontrado en la persona del Sr. Goines debido a lo que el juez llamó una incautación ilegal; la acusación formal fue descartada más tarde.
El dictamen llega en un momento de intenso debate público sobre la práctica del Departamento de Policía de parar, y en muchas ocasiones cacheando gente en la calle, algo que según el
departamento solo se utiliza después de que agentes tengan motivo fundado de criminalidad. Oficiales dicen que dicha practica ha ayudado a reducir el crimen.
“Esto es lo que ocurre cuando el gobierno no toma en serio aquellas ocasiones en las que se encuentra que los policías mienten en “detenciones y cacheos” dijo Deirdre von Dornum, una abogada de oficio, refiriéndose al caso Goines y su desenlazo. “Esto perjudica a todos; pone patas arriba nuestro sistema legal.” La Dra. von Dornum representó al Sr. Goines y al Sr. White, quien fue arrestado bajo circunstancias diferentes.
La Fiscalía de los Estados Unidos en Brooklyn dijo que estaba revisando el dictamen y evaluando sus opciones. El Departamento de Policía no respondió a solicitudes de comentarios.
El Sr. White también fue arrestado en 2008. En su caso, un equipo del Departamento de Policía y el FBI, actuando con base en información provista por un informante confidencial, detuvieron a una minivan de color marrón en Jamaica, Queens, en la que iban el Sr. White u cuatro mujeres, dijo el equipo.
Un cateo de la minivan resultó en la incautación de tres armas, incluyendo una hallada en el bolsillo derecho delantero del Sr. White, de acuerdo al dictamen.
Durante el juicio del Sr. White en 2009, también en un tribunal federal en Brooklyn, su abogada, la Sra. von Dornumhabíatratadodecontrainterrogar al Detective Herrmann con respecto a los hallazgos adversos del Juez Block concernientes a su credibilidad. Sin embargo, el juez, Nicholas G. Garaufis, concedió una petición del gobierno de que se le impidiera hacerlo.
El Juez Garaufis concluyó que el Juez Block no había hecho ninguna
determinación con respecto a la “veracidad general” del detective, y que el caso Goines era “completamente no relacionado” al caso del Sr. White, notó el Juez Calabresi en su decisión.
Pero el Juez Calabresi dijo que Tribunal de Apelaciones puede ser contrainterrogado con base en “previas ocasiones en las que su testimonio en otros casos haya sido criticado” por un tribunal por no “merecer ser creído.” Su opinión fue apoyada por la Jueza Rosemary S. Pooler; el Juez Dennis G. Jacobs disintió.
Daniel C Richman, profesor de derecho y previo fiscal federal notó que los agentes de policía involucrados en operaciones de droga y armas de fuego frecuentemente testifican en casos penales. Una pregunta central suscitada por el dictamen, dijo él, “es por cuánto tiempo y de qué formas el hallazgo de que un oficial de policía ha mentido en casos previos lo afectará en casos futuros.”
Él añadió que la decisión del panel hace “mucho más posible que jurados en el futuro oigan que un policía ha mentido previamente o de alguna manera se encontrado ser no veraz. Y esto hará que los fiscales piensen antes de usarlo en casos futuros.”